Es hora de un Pacto de Estado por los servicios públicos y el buen gobierno de nuestras Administraciones

Es hora de un Pacto de Estado por los servicios públicos y el buen gobierno de nuestras Administraciones

El voto de los empleados públicos será decisivo y estudiarán con detalle las propuestas de las diferentes opciones

La recta final de la legislatura y el comienzo de la campaña electoral para las próximas Elecciones Generales que se inicia hoy con la aprobación del decreto de disolución de las Cortes, debe marcar un nuevo tiempo para nuestras administraciones, los servicios públicos que reciben los ciudadanos y el papel que deben jugar los empleados públicos en el nuevo periodo social y económico que afronta el país.

El voto de los 2,5 millones de empleados públicos será decisivo y estudiarán con detalle las propuestas de las diferentes opciones políticas.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF), sindicato más representativo en las administraciones públicas y con creciente representación en el sector privado, considera que Gobierno y Partido Popular, así como el resto de las formaciones que aspiran a obtener representación parlamentaria en las próximas elecciones, deben impulsar una profunda reflexión sobre los errores cometidos durante la crisis económica y la legislatura que concluye.

CSIF ha trasladado a las fuerzas políticas la necesidad de alcanzar un acuerdo a corto y medio plazo, con el fin de mejorar la calidad de los servicios públicos, reforzar las plantillas, establecer buenas prácticas en la gestión de nuestras administraciones y devolver las condiciones laborales a los empleados públicos.

Los empleados públicos arrastran una pérdida de poder adquisitivo del 30 por ciento a lo largo de los últimos años.Además, las Administraciones Públicas perdieron 320.200 empleos en lo que va de legislatura: la sanidad y la educación pierden 116.000 efectivos, mientras las empresas públicas se desprenden de apenas 11.700 personas

Por eso se hace necesario un Pacto de Estado que permita consensuar criterios mínimos en la gestión y organización de los servicios públicos, garantizar unas administraciones independientes y despolitizadas y dignificar el papel que juegan sus trabajadores. En definitiva, queremos evitar que se cometan en el futuro los errores que han propiciado y agravado la crisis económica, además de recuperar y mejorar las condiciones laborales de los trabajadores tras los sacrificios realizados durante los últimos años.

Además, es hora de impulsar también una verdadera regeneración democrática, también en el ámbito laboral, con una reforma legislativa que abra los sindicatos a la sociedad española (mucho más plural y diversa que hace años), frente al actual ‘bipartidismo sindical’ que sustentan las organizaciones tradicionales.

Los sindicatos también debemos de reflexionar sobre nuestra responsabilidad en el desapego de la sociedad española hacia las organizaciones, realizar un ejercicio de autocrítica y elevar nuestro nivel de auto exigencia.

CSIF así lo ha entendido y ha adoptado un código ético, que pretende ser referente para el conjunto de las organizaciones, que refuerce la ejemplaridad y dé visibilidad social a la honestidad, el compromiso y la profesionalidad y la transparencia de nuestra organización.